Mostrando entradas con la etiqueta LA PÁGINA DE JAVIER LEOZ. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta LA PÁGINA DE JAVIER LEOZ. Mostrar todas las entradas

Javier Leoz: MISA FAMILIAR Domingo XXVII (A)



 *Objetivo: hay que saber cuidar lo que Dios pone a nuestro alcance. No malograrlo.
*Idea: ¿Qué podemos hacer por un mundo mejor?


1. MONICION DE ENTRADA
Buenos días a todos. La Eucaristía, un domingo más, nos invita a vivir como auténticos hijos de Dios. ¿Os imagináis un rosal sin rosas? ¿Una casa sin vida? ¿Un río sin agua? ¿Un bosque sin árboles?
A veces, los cristianos, podemos decepcionar a Dios. Es decir; no agradarle y hacer lo contrario a lo que El espera y quiere para nosotros.
Hoy, es bueno pensarlo, la viña del Señor, somos nosotros. Venimos aquí para que El nos cuide y corte aquello que estorba nuestro crecimiento espiritual y nuestra amistad con El.
Pidamos a Jesús que lo acojamos, que no lo dejemos fuera de nuestra vida y, sobre todo, que lo que decimos y hacemos vaya de acuerdo con nuestra fe. ¿Lo intentamos?
Recibamos al sacerdote con el canto.


2. PENITENCIAL
2.1. Nuestra vida cristiana está llamada ser una vida de ALEGRIA. Pidamos al Señor perdón porque nos cuesta sonreir y compartir nuestro gozo con los demás. SEÑOR, TEN PIEDAD (Una cartulina con una caricatura o emoticon triste)
2.2. Ser amigo de Jesús significa vivir como el vivió. ¿Por qué nos cuesta tanto realizar obras buenas y, en cambio, preferimos el camino del mal? CRISTO, TEN PIEDAD (Una rama totalmente seca)
2.3. Creer en Dios nos exige trabajar por la paz, por la justicia. ¿Buscamos el bien de los demás o sólo el nuestro? SEÑOR, TEN PIEDAD (Una bolsa con el símbolo del $)

3. MONICIÓN A LAS LECTURAS
Dios, a pesar de nuestros desaciertos, confía en nosotros y no nos paga con nuestra misma moneda y, además, nos llama a distinguir entre el bien y el mal y, sobre todo, a que florezcan en nuestras palabras y obras, los frutos del evangelio. No podemos decir que “amamos a Dios” y a continuación vivir en contra de su voluntad. Escuchemos atentamente las tres lecturas de este Domingo.

4. ORACIÓN UNIVERSAL
4.1. Por la Iglesia, viña del Señor. Para que con valentía trabaje siempre por hacer visible el amor que Dios nos tiene. Roguemos al Señor.
4.2. Por nuestra parroquia, colegio, familia, amigos, viñas del Señor; para que no dejemos de lado a Jesucristo. Para que lo defendamos frente aquellos que quieren silenciarlo. Roguemos al Señor.
4.3. Por nuestros corazones, viñas del Señor; para que los llenemos de silencio, para que los cuidemos con la Eucaristía y con la paz que Dios nos trae. Roguemos al Señor.
4.4. Por nuestros padres, educadores, catequistas, sacerdotes que son siervos del Señor. Para que nos enseñen a distinguir entre lo bueno y lo malo, el pecado y la perfección. Roguemos al Señor.
4.5. Para que en este mes de octubre valoremos los frutos que da el rezo del Santo Rosario. Para que nos preocupemos de rezarlo y de saber cómo se reza. Roguemos al Señor.

5. OFRENDAS

5.1. Te presentamos Señor, esta iglesia (una maqueta, fotografía, etc) es tu viña. Tu Iglesia. Un lugar en el que aprendemos a crecer en tu presencia. Un espacio en el que aprendemos amar y a ser la familia de los hijos de Dios.
5.2. Te presentamos, Señor, esta cepa repleta de frutos (etiquetas con perdón, amor, fraternidad, alegría, ilusion, fe, esperanza, etc). Ayúdanos a dar muestra de que la vida cristiana se nota en nuestra forma de ser y de vivir.
5.3. Te presentamos, Señor, esta piedra. Eres, Tú, Señor. Queremos edificar nuestra personalidad, nuestra felicidad sobre Ti. No dejes que nada ni nadie nos robe nuestra amistad contigo.
5.4. Te presentamos este SANTO ROSARIO. Simboliza nuestro afecto sincero a la Virgen María. Q
5.5. Te ofrecemos, Señor, el pan y el vino. Que nunca nos falten las fuerzas necesarias para combatir el mal, la injusticia o la mentira que existe a nuestro alrededor.



6. ORACION FINAL

YO SERE TU FRUTO, SEÑOR
En la tristeza,
PONDRE ALEGRIA
En la amargura,
SEMBRARE CALMA
En la desesperanza
LLEVARE OPTIMISMO
Si existe oscuridad
ALZARE UNA LUZ
Frente al llanto y las lágrimas
LLEVARE UN PAÑUELO DE CONSUELO
En el vacío
YO LLEVARE TU NOMBRE
En la angustia
ME ACORDARE DE TU CRUZ
Sí, Señor, yo quiero ser un fruto,
un fruto que sea regado por tu Palabra
cuidado por tus manos
podado por tus consejos
y alumbrado por el Evangelio
Amén










(Javier Leoz) Oración QUE NO SEA CRUEL CONTIGO, MI SEÑOR




Que reflexione, si en lo más hondo de mis entrañas,
brota la maldad o la bondad
abunda la alegría o la tristeza
el deseo de venganza el ofrecimiento de misericordia
Que recapacite siempre, Señor,
sobre si soy siervo  o dueño e interesado de tu herencia
Que nunca, más allá de darte gloria,
me quede con aquello que no me corresponde:
que en lo tuyo, sea siempre dócil y pronto
que en lo mío, nunca pretenda mi interés,
que en lo tuyo, actúe con diligencia y verdad
que en lo mío, sea siempre transparente
que en lo tuyo, sea auténtico y noble
que en lo mío, no fabrique mi propio “yo”


QUE NO SEA CRUEL CONTIGO, MI SEÑOR
Que no aborte los planes que has diseñado para mí
Que no obstaculice tu gracia con mis pecados
Que no frene tu Espíritu con mis malos modos
Que no esconda los buenos frutos de mi ser cristiano
QUE NO SEA CRUEL CONTIGO, SEÑOR
Hazme comprender que, lo que Tú me das,
no es mío…sino totalmente tuyo
Que a Ti, junto conmigo mismo, ha de volver todo
Que ante Ti, con lo bueno y lo malo,
he de dar cuentas de lo mucho o poco trabajado
Que por Ti, he de ser cepa y sarmiento
que, con buen gusto y buena cara,
he de  dar el diez, el veinte o el treinta por ciento
QUE NO SEA CRUEL CONTIGO, SEÑOR
Que no vuelva la espalda a tantos signos de tu presencia
Que no presente mil excusas para dejarme llevar por tu Palabra
Que no viva como si Tú no existieras
Que no camine dudando, una y otra vez, de si “esto es cosa tuya”
QUE NO SEA CRUEL CONTIGO, SEÑOR
No se cumpla mi voluntad, sino la tuya
No avance por mi camino, sino por tu senda
No descalifique a los que me rodean, sino que los comprenda
No trabaje para mi causa..sino siempre para Ti, para lo tuyo
contigo y contigo, con lo tuyo y para tu Reino.
Amén.







Javier Leoz; NO RESULTA FÁCIL Domingo XXVII (A)




1.Resulta difícil, y a veces doloroso, ser enviados una y otra vez a la viña del Señor. Entre otras cosas porque, las resistencias o contradicciones con las que nos encontramos, pueden llegar a mermar o debilitar nuestras iniciativas. ¡Cuándo llegaremos a comprender que no podemos ser más que el Maestro: Jesús también se topó con incomprensiones y descalificaciones.
Seguimos, un domingo más, en la viña y como viña del Señor. Y, al escuchar el evangelio de este día, retomo las palabras del Papa emérito Benedicto XVI en Alemania: “hay una progresiva indiferencia hacia la religión en las sociedades europeas”.


¡Qué peligrosa esta situación! ¿En qué valores sustentaremos el futuro de nuestras democracias? ¿Será posible prescindir del cristianismo (cuando algunos intentan con guante blanco o negro dinamitarlo) y mantener toda la estructura cultural, política, social que ha surgido como consecuencia de él?
            Hay muchas formas de tomar parte en un suicidio colectivo, en una ruina moral de nuestras sociedades. Una de ellas es precisamente la de quedarnos de brazos cruzados. La de no trabajar para que, el cristianismo, siga aportando a nuestra realidad aquello que tanto necesita y echamos en falta: ética, justicia, razón, progreso bien entendido y valores trascendentales. De lo contrario…podemos llegar a ser, sin darnos cuenta, viñadores suicidas de la inmensa viña que nuestros antepasados nos han dejado: la fe.
2.Muchas veces, más por demagogia que por convencimiento real, miramos a las instancias eclesiales como aquellos que matan las esperanzas de un nuevo modelo de Iglesia. Como si, el cambio real de nuestra Iglesia, dependiera de quien está arriba o abajo. Todos, allá donde nos encontramos, podemos dar un nuevo rostro, una nueva imagen a nuestra comunidad eclesial: con nuestro testimonio eficaz, vivo y comprometido. Y, ser cristiano o católico en estos tiempos, es ser conscientes de que muchas cosas las entendemos y las queremos al revés del mundo. Lo contrario, por si lo hemos olvidado, sería una traición al evangelio. No queremos una viña del Señor con los sarmientos que el mundo pretende injertarnos. No sería bueno una viña del Señor con el “abono envenenado” que los poderes fácticos intentan esparcir sobre lo santo y bueno que la Iglesia guarda como depositaria de la fe. No sería valiente, por temor o temblor, sucumbir ante los viñadores homicidas que, por muchos y variados intereses, intentan silenciar, vilipendiar y debilitar la riqueza de la viña del Señor porque la quieren a su antojo: en vez de uvas, quisieran que produjera manzanas…y eso no puede ser.
Seamos fieles a lo que el Señor nos ha confiado. No seamos colaboradores de los que, con crítica destructiva y bien orquestada, nos llaman a la deserción. Mantengamos nuestra unión y, en ella, estará nuestra fuerza. Somos la viña del Señor y, porque somos de El, estamos llamados a dar fruto divino (no mundano), a explotar en yemas de caridad, de amor, de justicia y de perdón. ¡Demos fruto y que sea abundante! Pero no seamos homicidas de lo mucho y bueno que el Señor ha sembrado en lo más hondo de nuestras entrañas. ¿Lo intentamos? Seamos fieles a lo que nos envía el Señor.


QUE NO SEA CRUEL CONTIGO, MI SEÑOR (Javier Leoz)
Que reflexione, si en lo más hondo de mis entrañas,
brota la maldad o la bondad
abunda la alegría o la tristeza
el deseo de venganza el ofrecimiento de misericordia
Que recapacite siempre, Señor,
sobre si soy siervo  o dueño e interesado de tu herencia
Que nunca, más allá de darte gloria,
me quede con aquello que no me corresponde:
que en lo tuyo, sea siempre dócil y pronto
que en lo mío, nunca pretenda mi interés,
que en lo tuyo, actúe con diligencia y verdad
que en lo mío, sea siempre transparente
que en lo tuyo, sea auténtico y noble
que en lo mío, no fabrique mi propio “yo”
QUE NO SEA CRUEL CONTIGO, MI SEÑOR
Que no aborte los planes que has diseñado para mí
Que no obstaculice tu gracia con mis pecados
Que no frene tu Espíritu con mis malos modos
Que no esconda los buenos frutos de mi ser cristiano
QUE NO SEA CRUEL CONTIGO, SEÑOR
Hazme comprender que, lo que Tú me das,
no es mío…sino totalmente tuyo
Que a Ti, junto conmigo mismo, ha de volver todo
Que ante Ti, con lo bueno y lo malo,
he de dar cuentas de lo mucho o poco trabajado
Que por Ti, he de ser cepa y sarmiento
que, con buen gusto y buena cara,
he de  dar el diez, el veinte o el treinta por ciento
QUE NO SEA CRUEL CONTIGO, SEÑOR
Que no vuelva la espalda a tantos signos de tu presencia
Que no presente mil excusas para dejarme llevar por tu Palabra
Que no viva como si Tú no existieras
Que no camine dudando, una y otra vez, de si “esto es cosa tuya”
QUE NO SEA CRUEL CONTIGO, SEÑOR
No se cumpla mi voluntad, sino la tuya
No avance por mi camino, sino por tu senda
No descalifique a los que me rodean, sino que los comprenda
No trabaje para mi causa..sino siempre para Ti, para lo tuyo
contigo y contigo, con lo tuyo y para tu Reino.
Amén.







LA PÁGINA DE JAVIER LEOZ, DOMINGO XXVII *Homilía *Oración *Misa familiar





MISA FAMILIAR Domingo XXVI (A) Javier Leoz



*Objetivo: prometer significa CUMPLIR
*Idea: ser cristiano es cumplir la voluntad del Señor


1. MONICIÓN DE ENTRADA
Bienvenidos en este último domingo del mes de Septiembre a la Eucaristía. ¿Os habéis parado a pensar alguna vez por qué pedimos perdón antes de sentarnos frente a la mesa del Señor? Pues hoy, el Evangelio, nos lo dice: no siempre estamos a la altura, no siempre actuamos bien: decimos querer ser buenos, y optamos por caminos malos; prometemos no olvidar a Jesús y,  a la vuelta de la esquina, lo dejamos de lado.
Que este Día del Señor nos ayude a ser más serios en nuestra fe y con nuestra Iglesia. Es decir; que antes de hablar pensemos si, lo que decimos, lo podemos y estamos dispuestos a cumplirlo.
Iniciamos esta celebración con alegría y con el canto.


2. PENITENCIAL
2.1. En el mundo sobran palabras y hacen falta buenas obras. Señor ten piedad. (Dos cartulinas: una de ellas con palabras sueltas y, otra más, con AMOR, JUSTICIA, VERDAD, FE, ESPERANZA…)
2.2. En el mundo sobran charlatanes y echamos en falta personas que ayuden y que acompañen a los demás. Cristo, ten piedad (Una pancarta con “BLA, BLA, BLA” y, otra más, con los MISIONEROS, SACERDOTES, CATEQUISTAS, PARROQUIA, etc)
2.3. En el mundo sobran promesas y queremos realidades. (Una cartulina con fotografías de políticos, cantantes, actores y, otra más, con POBRES, HAMBRE, HOSPITALES)

3. MONICION A LAS LECTURAS
Las lecturas de hoy nos invitan a cambiar. A superarnos. Dios, siempre, espera en nosotros. Además, si estamos unidos, nuestra unión será nuestra fuerza para conseguir todo aquello que el Señor ha pensado y quiere para nosotros y para los demás. Sólo desde la humildad y convirtiéndonos a Dios podremos agradar al Señor y convencernos que, el mundo, necesita más que nunca de la presencia de Jesucristo. Escuchamos.

4. ORACION UNIVERSAL
4.1. Por la Iglesia. Para que siga trabajando, a pesar de la escasez de personas y de medios, por cultivar la viña del Señor que son las parroquias, las misiones, los grupos, los sacerdotes y la fe. Roguemos al Señor.
4.2. Para que vayamos siempre por delante con la verdad. Para que pensemos siempre aquello que prometemos. Para que no digamos “sí” y luego sea un “no”. Roguemos al Señor.
4.3. Por los que piensan que ya están salvados y prescinden de Dios. Por aquellos que les importa poco o nada el vivir en la verdad o en la mentira. Roguemos al Señor.
4.4. Por todos los que nos encontramos en esta Misa Familiar. Para que después de salir de la iglesia no olvidemos todo lo que aquí el Señor nos dice y nos invita a vivir. Roguemos al Señor.
4.5. Por todos los profesores; por los que se encuentran todavía de vacaciones; por las actividades de nuestra parroquia. Para que las empecemos con mucha ilusión y nos comprometamos en alguna de ellas. Roguemos al Señor.

5. OFRENDAS
5.1. Con este sobre que dejamos ante el altar queremos enviar un mensaje a Dios: “SI”. Si a trabajar con EL; “sí” a ser mejores; “si” a trabajar por el Evangelio.
5.2. Con este sobre que depositamos delante del altar queremos enviar otro mensaje: “NO”. “No” al cansancio; “no” a la vergüenza; “no” a dejar a Dios de lado; “no” a cerrarnos en nuestros pecados o faltas.
5.3. Finalmente, con el pan y el vino, llevamos hasta el Señor nuestro deseo de que EL nos llene con su poder y con su verdad. Sin la Eucaristía, los domingos, serían unos días vacíos y, sin los domingos, nuestras almas y nuestros corazones se apartarían del camino de la fe. ¡Recíbelo, todo, Señor!


6. ORACION FINAL
YO SI QUIERO, SEÑOR
Ir contigo hasta el final
Colaborar con tus cosas
Corregirme con tu Palabra
YO SI QUIERO, SEÑOR
Marchar por tus caminos
Vivir en tu verdad
Amar con tu mismo amor
YO SI QUIERO, SEÑOR
Cuidar lo que Tú cuidas
Sembrar lo que Tú siembras
Dar lo que Tú das
YO SI QUIERO, SEÑOR
Trabajar en tu campo
Cuidar tu viña
Llevar alegría al mundo
Aportar ilusión y esperanza
YO SI QUIERO, SEÑOR
Pero, si en algún momento,
te digo que “si quiero”
y es un “no quiero”
perdóname, Señor,
y haz que vuelva al camino verdadero
Amén.













Homilía Javier Leoz: SIN RUIDO Y HACIENDO BIEN Domingo XXVI (A)

 

               Se nota cuando, nuestras palabras son eso: buenos deseos. Y, por el contrario, a veces los silencios hacen y dicen mucho. Hoy con el evangelio en la mano nos damos cuenta de que nuestro “si” no siempre es sincero ni creíble. Muchas veces está condicionado por el quedar bien con alguien o por algo, por salir airosos de algunas situaciones o, simplemente, porque con un “si vacío” solucionamos una situación puntual que, luego, se nos puede volver en contra. Es bueno pues aquella máxima de: “promete lo que vayas a realizar y calla aquello que te deje en evidencia”.


               1.Dios nos hace libres, y desde esa libertad, estamos llamados a cooperar con El. Conoce de antemano los sentimientos más profundos de nuestros corazones. Sabe, perfectamente, cuando nuestros labios emiten sonidos que en nada reflejan nuestro pensamiento. Pero, Dios, ahí está: aguarda, espera, confía una  y otra vez en el ser humano. ¿Por qué? ¡Nos quiere libres y libremente desea que le amemos! ¿Se puede querer a un padre por imperativo legal? ¿El amor es auténtico cuando se da largas o cuando se demuestra?
               2.Las parábolas siempre nos enseñan el camino de la salvación. Hoy, al proclamar la del evangelio, nos damos cuenta que como el hijo pequeño también nosotros somos muy propensos a posponer lo importante y a llevar a cabo lo secundario.
-Cuántas familias dicen un “si” al Bautismo; se comprometen ante Dios y ante la Iglesia  a educar en cristiano a sus hijos; luego no van en esa dirección adecuada y resulta ser un “no” olvidando cultivar la viña de la fe.
-Cuántos matrimonios, delante del altar, prometen fidelidad en lo bueno y en lo malo. Llegan las dificultades y el egoísmo o la presión del ambiente convierten todo eso en un “no”. Dejan de cultivar la viña del amor.
-En cuántos momentos, sumergidos en celebraciones musicalmente bellas y en impresionantes templos, decimos amar a Dios sobre todo; nos comprometemos a un cambio de vida…..pero salimos de las cuatro paredes del cenáculo festivo y, nuestra vida cristiana, se diluye en medio del océano del mundo. Se diluye no como sal…sino como algo insípido.
               3.¿En cual de los hijos nos vemos representados? ¿Somos hombres y mujeres de palabra? ¿Llevamos a la práctica aquello que prometemos? ¿Nos quedamos en “buenas palabras” o pasamos  a los hechos? ¿Es Dios el norte y guía de nuestra existencia? San Vicente de Paul llegó a decir “el ruido no hace bien; el bien no hace ruido”.
               No es bueno proclamar aquello que se quiere hacer sin llevarlo a cabo. Hay un primer paso para obrar según la voluntad del Señor: hacer el bien implica no hacer mal. Empecemos por ahí: no haciendo mal las cosas. No comprometiéndonos en aquello que, tal vez, supera nuestra capacidad o nuestras fuerzas. No somos más grandes cuando vamos pregonando lo que podemos construir (si luego se queda en paja) o cuando presumimos de estar en todo, pero dejamos a medio camino aquellas responsabilidades que se nos han encomendado.
               Demos gracias a Dios porque nos sigue llamando. Lo importante es ser conscientes de que, ciertos caminos que elegimos, nos apartan de El, de su amor, de su presencia, de su viña y del sendero que nos conduce a la salvación, a la felicidad o la gracia.
               No nos conformemos con los “mínimos” de nuestra fe. Además de la misa dominical, como cristianos, estamos llamados a trabajar un poco más nuestra personal viña. No podemos decir “si” al Señor y, luego, marcharnos por otros derroteros totalmente distintos al Evangelio.
Digamos “si” a Jesús. Con todas las consecuencias. No olvidemos que, el movimiento, se demuestra andando y que la fe cuando se trabaja…produce más fe.



MI “SI” DE CADA DIA, SEÑOR
Que sea para Ti con las pequeñas cosas que te ofrezco
y no en aquellas que pienso pero nunca alcanzo
Que lo veas en el detalle que ofrezco
y no en el escaparate del mundo en el cual me pierdo
MI “SI” DE CADA DIA, SEÑOR
Sea la verdad de mi vida,
y nunca la falsedad en la que me confundo
Sea pronunciado por el bien como respuesta
y no ahogado por el mal que me acompaña
MI “SI” DE CADA DIA, SEÑOR
Sea el llevar a feliz término:
cada promesa a mis prójimos
siendo rico llevando la paz conmigo
y ofreciéndola a los que caminan a mi lado
Desterrando el mal que me aparta de Ti
y aferrándome al bien que me habla de tu reinado
Siendo consciente de mis posibilidades
pero sin olvidar que, Tú, me las diste de balde
MI “SI” DE CADA DIA, SEÑOR
Sea darte lo poco o mucho de mi persona
La verdad de mi existencia
La sinceridad de mis palabras
La bondad de mi corazón
El deseo y la seguridad de que, ir por donde Tú me envías,
es el mejor camino para salvarme y ayudar a los demás.
¿Aceptas mi “si”, Señor?
Ayúdame a pronunciarlo, a que sea auténtico
y, nunca, me olvide de llevarlo a cabo.
Amén.











DOMINGO XXVI