Los astilleros de China procurarán avanzar sobre la industria offshore este año


(FNM) Ha comenzado un nuevo año y los grandes pronósticos pueden a veces aparecer poco confiables, pero lo que es de una certeza irrefutable es que procurará extender su influencia en el sector “offshore”, generando trabajo para los astilleros que traten de tomar ventaja de este lucrativo nicho.

Según Fei Kwok, abogada en finanzas y energía con sede en Shanghai, los chinos quieren aumentar su colaboración con las compañías occidentales para aumentar su conocimiento sobre el offshore y su capacidad para construir barcos de apoyo a esa industria. “Esa será la tendencia”, aseguró Kwok a Lloyd’s List.

Como resultados, habrá más fusiones, adquisiciones y proyectos conjuntos (joint ventures) en 2013, para consolidar las asociaciones ya creadas.
Kwok explicó que los noruegos ya están identificando potenciales objetivos para adquirir en China.
Sin embargo, existen dificultades para “encontrar los acuerdos adecuados”, agregó la profesional. Las barreras se centran en discusiones sobre protección de la propiedad intelectual y en cuestiones vinculadas con diferentes estilos gerenciales. “Es posible que veamos más y más colaboración, pero es difícil anticipar si se lograrán finalmente muchos ejemplos exitosos”, agregó.
Más allá del entusiasmo de los chinos, pasará un tiempo antes de que el país pueda estampar claramente su presencia en las áreas de alto valor de la construcción offshore, tales como las plataformas semisumergibles.
En su lugar, habrá más construcción de unidades de menor valor del tipo de los buques de apoyo y remolcadores para tendido y manejo de campo de anclas, por ejemplo. “Para moverse a un nivel más alto de la cadena, se necesitará una posición financiera muy fuerte”, afirma Kwok.
Algunos astilleros chinos han estado sufriendo financieramente, y hay otros factores que entorpecen la marcha hacia las construcciones de mayor valor, incluidos una falta de experiencia técnica y del correcto estilo de administración.
“De modo que se podrá asistir a muchas conversaciones, pero las mejoras sustanciales, podrán tomar otros cinco años, o más”, afirma la especialista.

Gaseros, también en la mira
Junto con la movida hacia las unidades y buques offshore, los astilleros prestarán creciente atención a la construcción de buques de transporte de gas natural licuado.
Para Kwok el GNL es visto por China como un mercado relativamente seguro, pues carece de las enormes fluctuaciones en los precios de las tarifas que se ven en otros sectores del transporte marítimo. Esta estabilidad atrae de las de créditos de exportación de China.
¿Podrán los astilleros chinos convertirse en los próximos grandes constructores de buques gaseros, sobrepasando a surcoreanos y japoneses?

Será una dura tarea, sostiene Kwok, porque si bien son siete los astilleros chinos con licencia para construir buques de transporte de GNL, solamente el astillero Hudong, en Shanghai, tiene experiencia en  la construcción de este tipo especializado de buques.
Si China pretende alcanzar la meta de construir 40 o 50 barcos gaseros en los próximos 15-20 años –como ha sido propuesto por el gobierno-, los siete astilleros deberían empezar a trabajar.
Si esos barcos se construyen, es probable que el gobierno y las compañías petroleras chinas pujen para que sean destinados a transportar el GNL   adquirido por China. Esto posiblemente expulsaría a otros armadores interesados en transportar cargas a China.
Por cierto, si China comienza a explotar sus reservas domésticas de gas de esquistos, que según se cree son las mayores en el , las importaciones de GNL por vía marítima a China podrían tornarse irrelevantes.
Tal escenario está cerca de la realidad, pues el gobierno chino está presionando fuertemente para que las compañías locales inviertan en gas de esquistos.
Por Hal Brown (Fuente: Lloyds List)
09/01/13