Hoy, jueves, ha comenzado en la Capilla de San Andrés el tradicional besapié a la imagen de Nuestro Padre Jesús del Soberano Poder, de la Hermandad de los Panaderos, que se prolongará hasta el próximo domingo.
Finalizados los cultos en su honor que han tenido lugar en la Iglesia de la Misericordia, a la que las imágenes titulares fueron trasladadas el pasado día 25 de febrero (ver) y de la que regresaron anoche, se celebra ahora el besapié al Señor, que se presenta a los devotos ante el retablo principal de la capilla de la calle Orfila, presidido en solitario por la Virgen de Regla vestida de hebrea.
El Señor del Soberano Poder viste túnica lisa de terciopelo burdeos y luce las potencias de salida. Está elevado sobre una alta peana de madera dorada y policromada en la que se puede leer una frase del Evangelio de San Juan sobre la escena del prendimiento que dice: "Cuando les dijo 'yo soy' retrocedieron unos pasos y cayeron en tierra".
Flanquean a la imagen que tallara en 1945 Antonio Castillo Lastrucci dos jarras con claveles rojos salpicados de flores moradas situadas sobre pies de madera dorada. Un poco más adelantados vemos dos blandones dorados con altos cirios blancos, mientras que justo detrás del Señor hay otros dos, más juntos entre sí que los primeros.
Jugando con las diferentes alturas que permiten los escalones del presbiterio de la capilla, se han colocado cuatro faroles plateados también sobre pies dorados, y tras ellos se levanta el altar que preside la dolorosa de la hermandad que cierra el Miércoles Santo, con diversos candeleros y candelabros, todos con cera blanca, un crucifijo de orfebrería en el centro, varios arreglos florales también con claveles rojos, y otras dos jarras más cerca de la Virgen con diferentes especies de tonalidades rosa y malva.
