EL SANTÍSIMO CRISTO DEL AMOR, EXPUESTO EN BESAPIÉ EN EL SALVADOR
La Hermandad del Amor celebra en este primer fin de semana de la Cuaresma el tradicional besapié al Santísimo Cristo del Amor, que se encuentra ante el retablo que la cofradía del Domingo de Ramos tiene en la Iglesia del Salvador.
El crucificado de Juan de Mesa se presenta a los devotos tumbado, apoyado en una estructura metálica de color rojo y con la parte baja de la cruz oculta por un forro de terciopelo rojo con el escudo de la hermandad. Ante la cruz se encuentra el pelícano que, como símbolo legendario del amor, figura en la parte trasera de su paso procesional.
El Cristo del Amor, que luce las potencias de salida, está flanqueado por dos jarras del paso de palio de Nuestra Señora del Socorro con claveles rojos. Además, está en el centro de un pasillo formado por un total de ocho grandes blandones dorados con cera color tiniebla, y junto al inicio del pasillo en el costado derecho está el estandarte corporativo. Asimismo, hay dos jarras más con claveles en cada lado.
El retablo de la hermandad está presidido en solitario por la Virgen del Socorro, que ya viste de hebrea. La dolorosa tiene claveles rojos a sus pies y tres candeleros dorados a cada lado también con cera color tiniebla, como los dieciocho candeleros plateados que ocupan las hornacinas, nueve en cada una, donde reciben culto habitualmente la Virgen y San Juan. En dichas hornacinas hay también sendas jarras del paso de palio con las mismas flores antes mencionadas.
Por último, hay que señalar que en el espacio entre el Cristo del Amor y el retablo se pueden ver en los extremos dos guardabrisones con pequeñas velas del mismo color que todas las que iluminan el altar del besapié, y el Señor de la Entrada en Jesusalén tiene a sus pies un centro de claveles rosas.