La hipocresía de PSOE e IU: recortes en Defensa y programas de armamento en Industria


Piden recortes en público y luego exigen nuevos programas de BAM, 8x8 y F110 en las enmiendas de los presupuestos.

Alfredo Pérez Rubalcaba (PSOE) y Cayo Lara (IU). | Archivo

Socialistas y comunistas han utilizado habitualmente los presupuestos de Defensa como ariete electoralista. Sus dirigentes no han tenido reparo en exigir con cualquier excusa un estricto recorte de los presupuestos destinados al sostenimiento y modernización de las Fuerzas Armadas, sobre todo en los últimos años, en los que la crisis económica ha azotado las cuentas públicas. Han sido protagonistas de manifestaciones en las que se pedían estos recortes al grito de "presupuesto militar para la universidad".

Pero esa petición también la han llevado al Congreso de los Diputados. Un ejemplo fue en el pleno monográfico sobre la Cumbre de la Unión Europea en marzo de 2012, cuando el líder de la oposición y secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró que para los socialistas es preferible recortar gastos en Defensa antes que en Educación o Sanidad. "Estamos de acuerdo en que hay que recortar, pero recortar es un problema de prioridades. ¿Qué recortamos, educación o defensa? Las dos cosas se pueden recortar. Y yo les digo, nuestra posición, Defensa", dijo.
Más clara aún en esta actitud han sido en las filas de Izquierda Unida, cuyos dirigentes no paran de exigir recortes en el gasto militar. De hecho, hace escasos días, el propio coordinador general de la coalición, Cayo Lara, encabezó una manifestación hasta la base de Rota (Cádiz) contra la pertenencia de España a la OTAN. Él mismo portaba una pancarta con el lema "OTAN no, empleo y vivienda sí. Gastos y hospitales para escuelas y hospitales".
Pese a estas declaraciones en público, ambos partidos han presentado enmiendas a las cuentas públicas para 2014 con el objetivo de que sean aprobados nuevos programas de armamento para las Fuerzas Armadas, aunque no en las partidas destinadas al Ministerio de Defensa, sino mayoritariamente en las de Industria, donde quedan más desapercibidas para sus votantes.

Programas para el Ejército de Tierra y la Armada

Tanto socialistas como comunistas coinciden en solicitar en estas enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) desarrollar la segunda fase del programa de los Buques de Acción Marítima (BAM) de la Armada, cuya construcción se llevaría a cabo en los astilleros que Navantia tiene en la provincia de Cádiz.
En el caso del PSOE, la enmienda número 1.307, pide al Gobierno que destine 15 millones de euros a este proyecto, que justifica como "apoyo a la innovación tecnológica en el sector de la defensa" y que se pagarían con emisión de deuda pública. En el caso de IU, en la enmienda 2.203 a los PGE, se pide destinar 10 millones de euros a este mismo programa, que se obtendrían de la Sección 31 (Gastos de diversos Ministerios) Servicio 02 (Gastos de los Departamentos Ministeriales) Programa 229M (Imprevistos y funciones no clasificadas) Concepto 510 (Otros imprevistos).

Mientras el partido de Rubalcaba se queda ahí en la solicitud de nuevos programas de armamentos, el grupo parlamentario de Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) pide un par más. En la enmienda 2.204, los parlamentarios de Cayo Lara piden una partida presupuestaria de 3 millones de euros para el programa de los vehículo blindados 8x8, que sustituirían a los BMR, y que sin concurso internacional ni similares exige que se contrate con Santa Bárbara Sistemas para su fabricación en la factoría de Trubia (Asturias). Más allá va Foro Asturias, que en las mismas condiciones de IU pide en la enmienda 410 que el dinero que se destine ascienda a los 15 millones de euros.
IU también pide en estos presupuestos generales un programa de armamento más. Exactamente, el de las Fragatas F-110, que vendría a sustituir a las actuales fragatas de la clase ochenta. En la enmienda 2.205 pide que se destine a este programa un montante económico de 5 millones de euros, que justifica en "la parálisis que sufre este proyecto que se constituye, para una empresa con vocación exportadora, en una excelente oportunidad para generar carga de trabajo en los años venideros".